Torrence A. Ballard

La fiesta no empieza hasta que esta chica llega. Si, caracterizada por su actitud divertida y sin esa hiperactividad tan singular, Torrence es una de esas chicas que no se pueden quedar quieta ni un solo minuto, la podrás ver bailando o simplemente moviéndose sin ritmo alguno, es extraño cuando la puedes ver tranquila, cuando eso sucede sabes que algo malo puede estar sucediendo, su estado de ánimo es tan notorio que todos se dan cuenta cuando se encuentra feliz, enojada, triste o simplemente sin ánimos, es ahí cuando más necesita a las personas que se encuentran a su alrededor a las que considera sus amigos y los cuales son su soporte, porque a pesar de todo ella es una chica delicada, como una muñeca de porcelana que con algún movimiento en falso puede llegar a quebrarse.

Amiga de sus amigos, una guardadora de secretos profesional y con una excelente habilidad para escuchar, si tu deseas comprensión y cariño, Torrence lo tiene para tí, ella no puede negarle la ayuda a las demás personas, es demasiado humilde como para hacerlo, mucho más cuando se trata de sus amigos. Con ella siempre contarás con un hombro donde derramar lágrimas, ella comprenderá y tratará dar los mejores consejos en las situaciones de las personas que se acercan, es por eso que es tan querida, porque los demás saben que al necesitar a una persona en quien confiar la rubia siempre está. Defensora de sus principios ella no cree en la violencia, prefiere arreglar las cosas de una manera civilizada, el hablar es su fuerte y mucho más en los casos como estos, así que si piensas buscarle pelea solo para molestarla, créeme no lograrás asustarla. Aunque claro, como cualquier otro ser humano esa bondad y serenidad llega hasta un punto, en el momento en que ella decide actuar y responder aquellos insultos que han cruzado la raya no podrás detenerla, por ello es mejor echarse a correr sin mirar atrás, porque la honestidad de sus palabras puede llegar a ser tan crueles que no muchos pueden soportarlo.

Soñadora infinita, ella puede tener veinte años, pero eso no ha hecho desaparecer a esa niña que lleva dentro, ella aún cree en los cuentos de hadas y que algún día el mundo será un lugar mejor. Pero, ¿Qué pasa en el ámbito amoroso? Ella soñaba con su príncipe azul, aquel chico que con sus ojos claros lograra enamorarla y hacerla vivir su propio cuento, pero aquello no era verdad, la mala experiencia con el amor, con su único amor, hizo desaparecer esa idea, ahora ella no cree en aquel sentimiento de pareja y prefiere alejarse cuando aquel sentimiento comienza a surgir, pues como dicen.. Es mejor decir aquí corrió, que aquí quedó.